Los cuartos para bebés o niños son un espacio pensado no solo para descansar y dormir, sino también para fomentar la imaginación, traer símbolos que fomenten a construir una percepción del mundo y, sin olvidar, brindar diversión a los más pequeños. Además de acoger a la infancia, aportar funcionalidad a este entorno y adaptar tantas funciones en un mismo ámbito suele requerir una inmensa creatividad por parte de madres y padres, por lo que la búsqueda de un profesional de la arquitectura puede ser más que bienvenida.
Es por eso que hemos seleccionado 20 ejemplos que ilustran diferentes formas de pensar este espacio, cada uno demuestra que la preocupación va más allá de un entorno saludable y seguro para el sueño de un niño. Equipos lúdicos como paredes para escalar, espejos o paredes que están pensadas para recibir intervenciones -con superficies fáciles de limpiar- son algunos de los elementos que destacan junto a los murales artísticos y el mobiliario diseñado a escala infantil y que también facilitan la vida diaria de los adultos que conviven con los y las niñas. Sigue leyendo para conocer la selección completa.